Año de publicación: 2021
Editorial: Apache Libros
Género: Literatura fantástica
Sinopsis
Siempre ha sido así. Desde el principio.
Si en las fiestas te pones a bailar puede que hayas bailado con la Muerte.
Si, en cambio, prefieres sentarte y charlar puede que hayas hablado con el Diablo.
Las llaves del Cielo se han extraviado y Dios está atrapado dentro. Ahora que nadie puede entrar o salir, cuando alguien fallece en la Tierra no termina de hacerlo.
La situación es tan desesperada que solo La Muerte (encarnada en un profesor de yoga) y El Diablo (un vendedor de artículos promocionales) pueden ponerle arreglo.
Pero antes deberán resolver sus diferencias...
Esta tragicomedia de ciencia ficción con tintes pre-apocalípticos cuenta también las tribulaciones de Merche y Bernardo, dos cincuentones hartos de todo para quienes la muerte quizás no sea tan mala opción.
Siempre y cuando consigan sobrevivir... por decirlo de algún modo.
«La novela ganadora de esta edición de los Premios UPC, Cielos clausurados, de Alberto Rodríguez Andrés, parte de una sorprendente premisa: san Pedro ha desaparecido y las llaves del Cielo se materializan en un sucio puticlub de Tijuana (sí, han leído bien). Así las cosas, Dios se ve obligado a (sub)contratar al Diablo por email... Ahí es nada.
Ciencia ficción irreverente y subida de tono, que provocará la carcajada (y quizás, el sonrojo) de más de un lector. Prepárense para conocer al Diablo, un individuo con mujer e hija, presidente y único empleado de Distribuciones Ibáñez que, lejos de exhibir su tridente y otros atributos, coge el metro a diario para ir a trabajar. Su búsqueda de las llaves del Cielo le llevará a establecer una alianza con la Muerte, en horas bajas por la situación. Y ambos, como en una apocalíptica buddy movie, recorrerán el mundo, camino de Chernóbil, para intentar revertir su pérdida. Y como trasfondo, una legión de muertos que no lo están tanto…
Una novela que supone un soplo de aire fresco en el panorama de la ciencia ficción actual, sin naves espaciales, alienígenas o inteligencias artificiales, y que no dejará a nadie indiferente.
Que ustedes la disfruten».
Miquel Barceló
Mi opinión
Ante todo, hay que fijarse en que partimos de una situación totalmente irrisoria y absurda, pero que a medida que se va desarrollando la trama consigue que resulte imposible soltar el libro.
El argumento me hizo recordar vagamente "Las intermitencias de la muerte" de José Saramago, básicamente, porque parte de una premisa similar. En el caso del libro de Saramago, se trataba de que la muerte dejaba de "trabajar" en una zona del país y en Cielos clausurados, San Pedro ha perdido las llaves y no puede morir nadie.
A partir de esa situación se desarrolla la trama. Llama la atención que el autor nos presente tanto a la Muerte como al Diablo como personas que tienen vidas absolutamente normales, con mujer, hijos, trabajo, perro, gato y hasta canario si cuadra. Es decir, son personas que te puedes cruzar o encontrar en el supermercado en un día cualquiera. Usan una carcasa "humana" para ejercer su trabajo real y si por cualquier causa, su carcasa sufre un percance, cambian de carcasa. Podría decirse que usan "fundas" tal y como ocurre en los libros de Richard Morgan pertenecientes a la trilogía de Takeshi Kovacs.
Al mismo tiempo que el Diablo y la Muerte tienen que hacer una alianza para resolver el problema de las llaves, nos encontramos con los no muertos. Muertos que despiertan dentro de su propio cadáver y tienen que intentar asimilar la situación. Lo cierto es que no se puede evitar sentir cierta pena y desasosiego por uno de ellos. Merche es entrañable y nos hace sonreír.
El libro mantiene el interés, las situaciones divertidas y absurdas se suceden y el autor nos arrastra por los distintos escenarios que se le van apareciendo a este grupo variopinto de manera eficaz.
Humor negro, cachondeo del bueno y un punto de vista de lo que pudo ser y no fue por parte de los no muertos que nos hace reflexionar sobre nuestra propia existencia. Tal vez, esos "y si", deberían transformarse en un "pa'lante y que sea lo que "dios" quiera".
Lectura ligera, rápida, dinámica y muy recomendable.
Nota: 4/5